Tejedor en la industria de la música: Paco Larrosa

Paco Larrosa: Soy de los que le gusta ir picoteando por aquí e ir preguntando a la gente por allá // Foto: Chema Helmet - Equipo Helmet
Paco Larrosa: Soy de los que le gusta ir picoteando por aquí e ir preguntando a la gente por allá // Foto: Chema Helmet - Equipo Helmet

Interviú a Paco Larrosa (director del festival Microsonidos, copropietario de la sala 12&medio y gerente del bar La Yesería).


festivalesdepop.com se citó con Paco Larrosa el pasado martes 29 de marzo a las 22:30h en el bar La Yesería. La entrevista se justifica sola, al tratarse de una charla con uno de los responsables de la música en directo en la Región de Murcia -prolífica en ciertos terrenos-, la otra parte de lo que queda en un negocio aun a estas alturas esté sin legislar. Un hombre que hace poco se sentía abandonado en su travesía por el desierto, sin agua y sin montura. Decidido, cueste lo que cueste, a finalizar el IV Microsonidos que empezó hace un par de meses en la sala 12&medio.

Una entrevista exclusiva con la pluma de Miguel Tébar y la cámara de Chema Helmet

Hola Paco, nos vemos a estas horas porque nos comentaste algún desajuste que tienes con el sueño…
– Eso me viene desde que era músico siendo chaval y ya por entonces comencé a acostarme a las siete u ocho, pues la verbenas donde tocaba terminaban pocas horas antes.

¿Cuánto tiempo llevas dedicándote a ‘la Noche’?
– Después de aquello empecé con un trabajo por la mañana, pero no quería desvincularme del mundo de la música, por lo que seguí dedicándome a los bares y a la noche. En el célebre año 1992 ya abrí este bar.

En el binomio de venta de alcohol y música, es obvio que el mercado que más ha sufrido pérdidas es el del disco ¿Seguís invirtiendo en comprar discos o utilizáis los formatos comprimidos pinchados desde un pecé?
– El último disco que compre sería hace siete u ocho años y esto es al menos extensible a mis locales, aunque esporádicamente he comprado algún vinilo en los conciertos por amistad con el grupo, apetencia personal o por puro coleccionismo.

¿Por qué piensas que tus clientes prefieran pagar 6€ por una copa y no por un cedé de serie media?
– Creo que las cosas tienen su precio en función de cada momento, el coste de un garito de noche se incrementa sustancialmente en comparación con el de una cafetería sin insonorización ni diyei y además uno no trabaja a esas horas porque sí. Mis camareros seguramente ganan más dinero que un funcionario.

Danos tu opinión del botelleo ¿Generacional o circunstancial?
– Hay que dejar beber a la gente donde quiera, siempre que cuando terminen no lo dejen todo lleno de mierda y se sepan comportar con el tema de los ruidos y las broncas. Aunque sea contrario a mis intereses y como no me gusta coartar las libertades, beber en la calle me parece normal hoy en día.

¿Desde cuándo llevas programando conciertos?
– De manera habitual desde la apertura del 12&medio, pero con la Yesería ya programábamos siempre que podíamos, porque cada vez que aparecía la policía y encontraba un micro nos obligaban a suspender por temas de permisos.

¿Con qué artista te estrenaste como promotor?
– En el 89 en unas fiestas de Molina de Segura, un amigo quería hacer algo y me metí como socio capitalista (con la pasta del piso que acababa de vender), aunque yo no elegí los grupos. Trajimos a Rosendo, Duncan Dhu y no sé quien más. Fue un desastre, como siempre, la primera vez que perdí un huevo de pasta.
Pero sin embargo pensé: me he quedado a gusto y no me ha dolido especialmente, por lo que quiero dedicarme a esto.

¿Puedes contarnos aquel concierto del que más orgulloso te sientes y otro del que te arrepientas o avergüences? ¿Por qué motivos?
– Esta semana estaba pensando en lo de Motorpycho, un grupo del que he estado cuatro años detrás y eso después de su negativa de volver a España tras haber metido a 30 personas en su anterior gira española -cuando por Europa meten miles-, al final los he conseguido traer a Microsonidos y me he dicho: hay que ver la cantidad de grupos que hace años hubiera matado por ir a verlos y al final los he conseguido traer a Murcia.
Recuerdo también el caso de TV Personalities (que por cierto me defraudaron porque no dieron suficientemente la nota) o de buenas bandas como Cracker que he traido para que toquen sólo ante 200 personas.
Por otro lado, me avergüenzo de haber tenido a Supersubmarina en Microsonidos, aunque tuvo su justificación ya que nos dejaron su equipo de backline para el otro grupo que los acompañaba y también me arrepiento de casos como el de DM3, que sí, son correctos, pero si ves su caché realmente no están a la altura, tocan una música que en estos momentos no aporta nada.

¿La impuntualidad al inicio de los conciertos es un factor negativo o ayuda a hacer caja?
– El famoso tópico es falso, desde el punto de vista de que durante todo ese retraso no hay nadie en la sala. Empezar tarde viene heredado de cuando las condiciones técnicas no eran buenas y la gente tenía que esperar a que terminasen de probar para poder entrar. Pero hoy día es normal que el grupo esté esperando a que llegue el público y éste no entre porque el concierto no ha empezado. ¡La pescadilla que se muerde la cola! El retraso habitual suele ser unos quince minutos excepto cuando hay fútbol.

¿Enumerarías los músicos que te han trabajado como camareros o pinchadiscos?
– La verdad es que aquí hemos sido como una maternidad, todo un lujo sin quererlo: Alondra Bentley, Marina de Klaus & Kinski o Emilio de Noise Box han puesto copas, ha pinchado gente de Second, de Schwarz…

¿Cuáles son las mayores dificultades que está atravesando cada una de las dos actividades que intuimos sustentan tu vida?
– Quien no tiene no puede gastar y el que tiene decide ahorrar por si viene la cosa peor todavía, en lo que es el negocio hostelero estamos teniendo una bajada en la facturación del 60-70%.
En cuanto a los conciertos, creo que en Murcia llevamos unos años de saturación, hay una excesiva oferta y falta de público. En la escena alternativa o independiente, que es donde nos movemos nosotros, terminas viendo siempre las mismas caras, el púbico que acude a este tipo de concierto está muy acotado y no da abasto para atender todo lo que se le ofrece.

¿Es posible aventurar cambios? ¿Hacia dónde?
– Hay que tratar buscar grupos que tengan cierto tirón entre el público, pelear por abaratar sus cachés y a la vez intentar ser mínimamente original y no traer «lo de siempre», aunque la primera premisa te obligue a contratar bandas con un mínimo de promo hecha. De otra manera el bolsillo no puede y la apetencia por asistir se diluye. Creo que al final habrá un reajuste y el exceso de oferta terminará reduciéndose. Todo debería volver a su sitio.

¿Qué te parece que los festivales de música sean financiados en mayor medida con dinero público? ¿Está justificada la inversión pública de cultura en casos puramente mainstream o es misión de nuestros gestores velar más por la calidad que por la cantidad?.
– Es complicado pero tiene su sentido, desde el punto de vista de reclamo turístico es incluso inferior al coste de otras campañas publicitarias con menor resultado. Si lo que hablamos es desde el plano de promoción cultural exclusivamente, seguramente no lo tenga. Cuando el artista más o menos comercial ya tiene su público no necesita de ayudas públicas, pero sí cuando se trata de traer a aquellos músicos que de otra manera no se podrían, pues por desconocimiento no hay público suficiente para pagarlo por muy bueno que sea. En ambos casos, el coste de producción, de personal y técnico es aproximadamente el mismo, la diferencia radica en los cachés.

¿Compartes el parecer de que en este país se ha malcriado a los consumidores de música en directo, con entradas muy por debajo a su coste real?
– Lo pienso aunque sea el primero que lo está haciendo y compita de esta manera conmigo mismo. Las cosas valen lo que la gente está dispuesta a pagar por ellas. Por lo que volviendo al punto anterior, para poder permitir acercar a la gente ciertos conciertos, estos tendrán que estar subvencionados aunque se marque un precio de la entrada inferior a lo que equivaldría su caché, inviables en casos de locales con aforo reducido.

¿Es muy complicado encontrar patrocinadores privados?
– Realmente sí, aunque últimamente recibamos ofertas de marcas alcohólicas por su limitación a ser publicitadas, no entiendo bien su política de promoción.

¿Cuál es el mejor festival de música indie?
– Evidentemente el Primavera Sound de Barcelona o el Tanned Tin de Castellón, aunque a éste nunca he ido, suele tener un cartel muy apetecible.

¿Cómo defenderías tu proyecto de Muestra Internacional de Música Alternativa?
– Sin ayudas es complicado. Contratar grupos desconocidos no es viable. El planteamiento de Microsonidos fue el siguiente, la administración regional organiza conciertos en recintos públicos con unos costes de producción brutal -por ejemplo, abrir las salas del Auditorio Víctor Villegas es muy caro para muchas veces tener un alcance de público limitado-, por lo que nosotros les planteamos con el mismo gasto público triplicar o cuadruplicar la oferta para la ciudad e intentar compensar los costes con la venta en las barras y poder llegar a un equilibrio. Para la sala no es una inversión que se hace con el fin de esperar obtener beneficios, pero sí que ayuda en cuanto a promoción e imagen.

¿Qué te parece que para mantener un festival concreto otros, menores pero al menos igual de interesantes, se queden sin ayudas y desaparezcan?
– Tanto hacen muchos poco, que pocos mucho. De hecho soy partidario de no dejar morir muchos pequeños para mantener uno grande. Creo que quienes estamos metidos en el mundillo -y no nos conformamos con ver a las cuatro estrellas de turno- lamentamos ver cómo se insiste en mantener vivo un monstruo, que está muy bien pero que igualmente lo estaría si fuese menos grande y con las sobras se pudieran mantener otras muchas propuestas.

¿Qué estilos de música escuchas habitualmente fuera de La Yesería?
– Para mi no es tanto una cuestión de estilos sino de gustos, cada uno tiene los suyos y yo no puedo decir que escuche de todo. Reconozco que no soporto la música latina y que en general la música electrónica me tira para atrás. En casa y en el coche aprovecho para escuchar la música que aquí no se suele pinchar, música más tranquila, con menos BPM.

¿Recordarías a los lectores de festivalesdepop un grupo o un disco que quizás no consideren?
– Ahora mismo estoy flipado con Secret Cities, un grupo que he puesto hasta la saciedad en Facebook y que al poco de descubrirlos he tenido la suerte de poder contratarlos.

¿Sabías que Yo la Tengo lo primero que preguntaron antes de entrar a la Yesería fue si se fumaba dentro? …Georgia, la mujer de Ira al final lo pudo convencer para que entrara, pero no aguantaron dentro ni media cerveza. ¿Piensas que han mejorado los espacios cerrados sin humo?
– Creo que sí, las cosas son como son, al final la gente se tendrá que acostumbrar. Aunque no entiendo que si hay locales que quieren permitirlo y se publicitan como tal se les prohíba hacerlo, siempre que cumplan con sus licencias específicas, sistemas de homologación e informen a sus trabajadores de la peligrosidad que conlleva.

¿Dónde radica la diferencia lógica para que en el 12&medio sí pueda haber música en directo y en otros garitos no?
– Debería de estar en cuanto al volumen y al aforo, pero es un misterio que va por rachas y en función del capricho de la policía o de los vecinos, pues no existe una licencia específica para locales de conciertos. Recuerdo sin ir más lejos el concierto de Arborea aquí en La Yesería –que por cierto vienen a tocar de nuevo en junio-, un concierto delicado, su música era como un susurro, ¡si abrías una botella los molestabas a ellos!, y aun así se nos plantó una patrulla dándonos el toque.

¿Algún error profesional que no repetirías?
– ¡Muchísimos! Desde el primer concierto que te conté antes en el que aprendí: si has de perder dinero hazlo con algo que te gusta, hasta la experiencia del embolado que fue el festival Murcia Sound. Desde entonces siempre estoy muy pendiente del calendario universitario -al igual que del futbolístico- para elegir las fechas.

¿Cualquier tiempo pasado fue mejor?
– En absoluto, pienso todo lo contrario y me molesta especialmente la actitud de esos que opinan: «ya no se hace música como la de antes» o «el single en vinilo es lo más», todo con un cierto tufo a superioridad y patetismo.

Un combinado alcohólico…
– Güisqui con hielo y un chorrico de agua.

… y un temazo llenapistas e inmortal.
– Ahí me has pillado, desde hace quince años no me acuerdo de los nombres de las canciones ni de los discos. Yo me considero un diyei mensual, que en vez de pinchar temas le gusta pinchar diyeis. Te podría tararear algo, pero mejor que no.

Gracias por tu tiempo y por la música.
¡Qué sigáis cumpliendo años: tú, La Yesería, el 12&medio y el Microsonidos!

Aprovechamos para recordar lo que resta del Microsonidos:

viernes 01 de abril (entrada libre)
Lüger + Picore + 300 Días de Sol

sábado 02 de abril (entrada 6€/8€ en taquilla)
‘Cutre Ye-Yé’: Al Supersonic & the Teenagers + los Inmediatos + the Runarounds

martes 05 de abril (entrada 8€/10€ en taquilla) *
the Wave Pictures + Santi Campos

viernes 08 de abril (entrada libre)
Butterfly Explosion + Noise Box + Neuman

jueves 21 de abril (entrada 6€)
‘Carpet Show’: Dënver + Pablo Araujo

viernes 15 de abril (entrada 12€/15€ en taquilla)
Motorpsycho + Schwarz

sábado 16 de abril (entrada 9€)
Lagartija Nick + Very Pomelo

jueves 21 de abril (entrada 6€)
‘Carpet Show’: Rue Royale + Luis Arronte + Clin Clin

jueves 04 mayo (entrada 6€)
‘Carpet Show’: Secret Cities + Germán Beteta

Nota: Todos los conciertos darán comienzo a partir de las 23h excepto: los Carpet Show incluyen cena fría a las 21:05h y a las 22h el primer artista o * que comienza a las 21:30h.


Escucha la playlist de Microsonidos 2011

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