Lapido conoce las Formas de Matar el Tiempo

Una entrevista de Miguel Tébar A. (8 de mayo de 2013 vía correo electrónico)

Soy
más de
soleás
que de
alegrías

¡Hola José Ignacio! ¿Encuentras otras Formas de Matar el Tiempo distintas a componer canciones? ¿Cuáles?
– Escribir canciones es una forma de pelear contra el paso del tiempo. Una lucha que de antemano está perdida porque el Tiempo acabará con todos nosotros, más pronto o más tarde. Otras formas de esa particular lucha serían la lectura o la contemplación de obras de arte.

-Tras tres lustros de carrera en solitario ¿qué podemos encontrar de novedoso en tu séptimo trabajo?
– Diez canciones nuevas, ¿te parece poco?

¿Qué simboliza el interrogante con fichas de dominó en tu portada?
– Bueno… puede ser una interrogante o una espiral. El diseño es idea de Alfonso Aguilar, que ya ha trabajado conmigo en anteriores discos y sabe muy bien convertir en imágenes los mensajes que flotan en mis canciones. En esta portada están los conceptos de orden, el vacío, el azar y la amenaza de que todo se derrumbe de un momento a otro.

¿Sientes que hayamos superado la necesidad de explicar tu nombre como «quien fue ex compositor y guitarrista de 091» al referirnos a José Ignacio Lapido?
– Llevo el mismo tiempo en solitario que el que estuve en 091 pero no me molesta que se me presente así. En cierta manera es lógico. Y además estoy orgulloso de aquella etapa.

Sin duda, una de las características destacables de aquella reivindicada formación fue la de tener un buen frontman que cantaba muy convincentemente las canciones de un gran compositor ¿Es necesario avanzar siempre a la primera línea de fuego?
– En mi caso, cuando acabó la historia de 091 estuve dudando el camino que tomar. Pensé hacer otro grupo y pensé en dedicarme a componer para otros. Al final me decidí a cantar yo mismo mis propias canciones. Eso conllevaba ponerme en el centro de escenario. Y aquí sigo.

¿Pudiera ser de mal pensado creer que artistas como Miguel Ríos, Amaral, Quique González, Mikel Erentxun o bandas como M·Clan y Amparanoia te pueden reportar más ingresos (por derechos de autor) que la venta de tus propios discos?
– Pues si le digo la verdad no he hecho la contabilidad. Lo que sí le puedo decir es que yo estoy muy agradecido a estos artistas que nombras por haber grabado mis canciones. Son todos ellos gente de mucho talento y de una gran relevancia en la música española. El hecho de que hagan versiones de mis temas o que me hayan llamado para que les escribiera algo es todo un honor para mí.

¿Explícanos la sensación que te produce escuchar tus temas en voz de otros?
– Como los que han interpretado temas míos son todos ellos fenomenales intérpretes pues uno siente que el tema crece. Todos añaden parte de su personalidad y para mí resulta muy curioso y clarificador escuchar sus interpretaciones.

¿Estás de acuerdo con aquella interpretación de tus letras por el filólogo Jordi Vadell «En cada lamento que se hace canción…»?
– No era cuestión de estar de acuerdo. El libro lo escribió él y debe ser suya la interpretación. Lo que sí creo es que hizo un trabajo muy serio, muy bien documentado. Un análisis crítico de cualquier obra debe partir de algo así, de una labor previa de documentación y de una puesta en contexto, temporal y estilística.

¿Es cierto que resulta más complicado escribir en tono positivo que contar historias derrotistas?
– No diría yo que mis canciones sean derrotistas. Hablan de la derrota, pero eso es otra cosa. Ya he dicho otras veces que yo soy más de soleás que de alegrías.

¿Sentiste más la muerte de Joe Strummer o la de Enrique Morente?
– No puse en una balanza ambas circunstancias. Las dos muertes fueron inesperadas y muy tristes.

¿Qué tal llevas la experiencia al frente de Pentatonia Records? ¿Servís de trampolín a más músicos?
– Llevo con Pentatonia desde 2005. Y creo que tomé la decisión correcta al arriesgarme y ser yo el que autogestionaría mi producción discográfica. En cuanto a otras bandas… lo siento, pero no tengo tiempo ni recursos económicos para que el sello se abra a otros artistas.

La
cuestión
no es
dar
sorpresas,
es dar
buenos
conciertos

¿Algo que recomendar/descubrir de la escena granadina?
– Barreré para casa: Víctor Sánchez, con su debut discográfico: Yo quemé a Gram Parsons. Jean Paul, que están preparando nuevo disco. Y S.U.E., banda que entra a grabar próximamente con producción de Paul Grau.

Aquí tenemos nuestra lucha por la defensa de Marina de Cope. Por favor, ¡Cuéntanos lo de «Viva La Vega»!
– Miguel Ríos se puso en contacto con algunos grupos de Granada para participar en un concierto solidario en defensa de La Vega de Granada, para salvar lo poco que queda de la especulación urbanística. Yo canté un tema con él en ese concierto. Como siempre, fue un placer y un honor compartir escenario con Miguel.

Casi siempre actúas por las mismas ciudades, imagino que tendrás en ellas tendrás un público fiel pero ¿Cómo interaccionas con tus seguidores para mantenerlos?
– Pues no sé qué decirte… lo único que hago es grabar discos y dar conciertos. Si siguen siendo fieles es porque imagino que mis discos y mis conciertos les siguen gustando. No les regalo nada por sus cumpleaños, si es a eso a lo que te refieres.

Partiendo de que no todos sois Bruce Springsteen ¿Cuál piensas que es la duración adecuada en un concierto de rock sin fuegos artificiales?
– Mis conciertos se acercan a las dos horas. Lo de la duración es relativo. Media hora de concierto se puede hacer larga si el grupo que toca es aburrido, y tres horas pueden parecerte pocas si la banda es tu preferida y llevas varios años intentado verles en directo.

Al producir tú mismo el disco, componer la letra y música de todas las canciones y grabarlas con el acompañamiento de tu banda habitual durante los últimos años: Víctor Sánchez, Raúl Bernal, Popi González y Paco Solana ¿Qué sorpresa puede deparar escucharte en directo?
– La cuestión no es dar sorpresas, es dar buenos conciertos. La banda está engrasada, y como es habitual las canciones adquieren en directo una musculatura importante, producto, imagino, de la adrenalina.

Las tres últimas preguntas sobre el sector: ¿Cómo ves el futuro de la industria musical?
– Muy mal.

¿Tu última adquisición musical? ¿en qué formato?
– No ha sido adquisición, ha sido un regalo. El cedé de un grupo malagueño que se llaman Blackberry Clouds. Muy recomendable.

¿Te fías de lo que escriben los críticos musicales?
– Depende del crítico, pero leo casi todas las revistas musicales que se publican en este país, en papel y en la Red.

Gira de Lapido

10 de mayo – Sala B – Murcia 23:00 H.
11 de mayo – Sala Wah Wah – Valencia 22:30 H.
18 de mayo – Sala El Tren – Granada 23:00 H.
24 de mayo – Sala Sidecar – Barcelona 22:00 H.
25 de mayo – Sala López – Zaragoza 21:00 H.
31 de mayo – Sala Caracol – Madrid 21:30 H.
7 de junio – Sala Azkena – Bilbao 21:30 H.
8 de junio – Sala Porta Caeli – Valladolid 21:00 H.