Joan as police woman y su grupo actuaron en la sala Audio durante la jornada electoral en los EE.UU.
Una crónica de Chema Helmet
Quién: Joan as police woman
Dónde: Sala Audio (Murcia)
Cuándo: 04 de noviembre de 2008
La cordial y afable Joan Wasser – piano, teclado, guitarras, voz- es una talentosa música y compositora originaria de Connecticut (EE.UU.), que bajo su alias de mujer policía se presentó en el escenario de la Sala Audio acompañada de Timo Ellis -bajo, ukelele eléctrico, voces- y Parker Kindred -batería, voces-.
El grupo acababa de llegar a Murcia ese mismo día tras tocar en Finlandia la noche anterior, y a pesar del previsible cansancio, Joan no perdió la sonrisa ni la frescura ni un sólo instante.
Esa noche flotaba en el ambiente una mezcla de ilusión y anhelantes expectativas que la inminente elección del cuadragésimocuarto presidente de los Estados Unidos de Norteamérica presagiaba. Por ello Joan se mostró especialmente locuaz y cercana. Se le notaba a la legua su fe en el entonces todavía candidato Obama.
Joan es una artista con una intrigante y magnética presencia sobre el el escenario y con una irresistible fuerza como compositora: en los dos discos que ha editado hasta la fecha uno puede encontrar canciones soberbias llenas de angustia, de desengaños amorosos y de emociones en primera persona. Son canciones directas a base de neo folk, soul y rock, canciones impregnadas en su fondo de una pátina rebelde y punk que en directo ganan en cercanía y verosimilitud gracias a la entrega con la que son interpretadas.
La mayoría del concierto se basó en canciones extraídas de To survive, el segundo disco editado hasta la fecha por Joan. Canciones como To America, ("el amor te salvará / intenta no morir por falta de amor / y alimenta tu hambre"), grabada originalmente a medias con Rufus Wainwright y que (obviamente) dedicó a Obama. En el directo fue Timo Ellis quien se encargó con gran soltura de hacer de Rufus.
Joan as police woman también tocaron una deliciosa y sosegada versión de Fire (Jimi Hendrix), y fue una delicia escuchar en los labios de Joan su sensual estribillo ("sólo tengo un deseo ardiente / déjame quedarme cerca de tu fuego").
Los continuos cambios de instrumento de Joan entre canción y canción (la chica lo toca todo) cortaron un poco el ritmo del show, y al principio costó un poco engancharse, pero conforme la actuacion avanzaba fuimos entrando progresivamente en calor y nos fuimos sumiendo sin remedio en las simas emocionales que la voz de la mujer policía iba excavando ante nosotros.
Generosa en sus bises, y como es costumbre en ella, tras su recital la artista salió a la entrada del recinto a firmar discos y a departir con desparpajo y soltura con sus fans y simpatizantes en general. Bonito detalle.